jueves, 17 de julio de 2014

'LA APOLOGÉTIGA Y LOS INCONSTANTES' | Mario Sillaro

Hablemos de Apologética

La Apologética en teología y literatura consiste en la defensa de la fe conforme a una posición o punto de vista. La palabra Apologética proviene del griego apología (απολογία), que designa la posición de defensa militar contra un ataque.

La apologética en la Iglesia primitiva

En la antigua iglesia Cristiana existieron maestros apologéticos, como son: Pablo (2 Corintios 10:5), Pedro (1 Pedro 3:15), Judas (Judas 1:3), etc. La defensa que todos ellos hacían era mayormente hacia los judíos, los cuales eran tropiezo para los nuevos creyentes cristianos. Otra corriente que aumentó la apologética en el Paleo-cristianismo fue cuando comenzó el Gnosticismo cristiano, el cual después Ireneo de Lyon condenó como herejía en el 180 d. C.

El mejor ejemplo de defensa del primer siglo se encuentra en el Nuevo Testamento, el cual relata que existió un hombre llamado Apolos que practicó la apologética de una manera audaz. En el libro de los Hechos se le menciona más precisamente: «Llegó entonces a Éfeso un judío llamado Apolos, natural de Alejandría, varón elocuente, poderoso en las Escrituras. Este había sido instruido en el camino del Señor; y siendo de espíritu fervoroso, hablaba y enseñaba diligentemente lo concerniente al Señor...» Hechos 18:24,25 (RV), Apolos al parecer estaba errado en algunos puntos doctrinales y fue instruido por Priscila y Aquila. Aparentemente fue muy bien instruido y llego a ser un excelente apologista, pues la biblia relata lo siguiente de su respectiva persona: ...«y llegado él allá, fue de gran provecho a los que por la gracia habían creído; porque con gran vehemencia refutaba públicamente a los judíos, demostrando por las Escrituras que Jesús era el Cristo».

La apologética y los indoctos e inconstantes

Cuando alguna persona presenta una postura para defender o rechazar un dogma "x", es necesario que este bien preparado para recalcar que su ideología es la que realmente expresan las Escrituras... Y NO para exaltar únicamente los dichos de su boca como única y verdadera; sin aceptar ser señalado o contradicho sus palabras.

El apologista generalmente va al frente de batalla, inicia el ataque y luego debe contar con los medios suficientes para resistir cualquier tipo de contraataque y mostrar firme su defensa.

El Apóstol Pedro nos advierte en una de sus epístolas:

2 Pedro 3:16 "Entre las cuales hay algunas difíciles de entender, las cuales los indoctos e inconstantes tuercen, como también las otras Escrituras, para su propia perdición".

Los indoctos: Son relacionados con personas infieles o incrédulos a La palabra de Dios, en esta rama se encuentran los evolucionistas, agnósticos, ateos, la falsamente llamada ciencia, los filósofos y toda persona que se cree sabia y muy erudita.

Los inconstantes: Son los más peligrosos para la fe cristiana, pues estos no son tan fáciles de reconocer, pues son los que predican doctrinas de demonios y alimentan con leche adulterada al Pueblo de Dios, DESVIANDO DE LA FE A AQUELLOS QUE HABÍAN SALIDO DE LAS GARRAS DEL ENEMIGO DE DIOS.

Actualmente ,en Internet pululan miles de INCONSTANTES, que les agrada publicar estudios Y amenazan con eterna perdición a aquellos que no concuerdan con sus erradas enseñanzas.

No solo envían al infierno a aquellos que los contradicen sino que responden con ira, insultos y prepotencia a aquellos que se atreven a enfrentarlos y colocarlos en aprieto. Pues, sus argumentos están basados en dos o tres textos bíblicos mal interpretados o mal traducidos de los manuscritos griegos más antiguos; y una vez que se los deja sin argumentos para sostener "sus santos mandamientos", les arrojan todo tipo de vituperios y los expulsan de sus foros.

¡¡Que contradicción!! Arrojan la piedra y cuando alguien les replica esconden la mano..diciendo que son de tropiezo para sus seguidores todo argumento contra sus palabras.

En tantos años de debates por este medio ,ya ni recuerdo cuantos INCONSTANTES, amadores del reconocimiento de sus fans, me han expulsado de sus foros al contradecir sus erróneas enseñanzas.

Terminare con las palabras del hermano Mauro Negron: "CORRIGE AL SABIO Y LO HARÁS MÁS SABIO; CORRIGE AL NECIO Y LO HARÁS TU ENEMIGO...".

[Nota publicada el día 02 de Junio, 2014]
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Mario Sillaro es originario de Argentina. Ha ministrado como pastor, evangelista urbano y apologista.